1Caliente el aceite de oliva en una sartén grande y sazone el pollo con sal y pimienta, cocine 5 minutos o hasta que esté ligeramente dorado. Retire y reserve.
2Añada la cebolla cortada en rodajas finas a la misma sartén y saltee todo durante 5 minutos. Añada el ajo muy picado, los champiñones fileteados y el pimiento en rodajas finas. Saltee otros 4 o 5 minutos o hasta que la cebolla se haya dorado. Añada el concentrado de tomate y déjelo cocinar durante 1 o 2 minutos. A continuación, añada el vino. Lleve a ebullición, removiendo constantemente y, una vez hecho esto, añada los tomates y rompiéndolos con una cuchara de madera. Espolvoree con el romero y el orégano y añada el pollo a la sartén. Sazone con sal y pimienta, tape y deje cocinar durante 20 minutos, removiendo de vez en cuando.
3Compruebe que el pollo esté tierno. Si no lo está, tape y deje cocer otros 10 minutos. Luego coloque en la fuente donde se va a servir.
4Si la salsa está demasiado líquida, deje hervir, sin tapar, durante 5 minutos o hasta que se espese. Sazone a gusto y riegue el pollo con la salsa. Sirva inmediatamente.
00:00
1 Review
Maria LE
June 28, 2016
Yo por mi parte prefiero utilizar más tomates frescos y menos en conserva. Seguramente el resultado no es exactamente el mismo, pero sí más natural.
Maria LE
June 28, 2016
Yo por mi parte prefiero utilizar más tomates frescos y menos en conserva. Seguramente el resultado no es exactamente el mismo, pero sí más natural.