1Corte las pechugas por la mitad y haga un corte estilo mariposa para que no queden gruesas. Condimente con sal y pimienta y reboce en harina.
2En una sartén grande, a fuego medio, derrita 2 cucharadas de mantequilla junto con 3 cucharadas de aceite de oliva. Fría 2 pechugas hasta que se cocinen por completo y estén doraditas. Transfiera las pechugas a un plato y derrita dos cucharadas más de mantequilla y 2 cucharadas de aceite en el mismo sartén, y fría las 2 pechugas restantes de la misma manera. Transfiéralas al mismo plato. En la misma sartén, agregue el jugo de limón, el caldo y las alcaparras hasta que lleguen a un hervor, raspando el fondo de la sartén para obtener todos los sabores. Compruebe el condimento. Regrese las pechugas a la sartén y cocine a fuego lento por unos 5 minutos. Retire las pechugas nuevamente al plato y añada el resto de la mantequilla (2 cucharadas) a la salsa hasta que se derrita, añada los champiñones y el jamón picado en fajitas finas, y cocine por 1 o 2 minutos. Vierta la salsa sobre las pechugas.